Falta de práctica en Lean Startup: ¿Capacitaciones o fast food?

Conocé como la falta de práctica en Lean Startup afecta al desempeño de quienes aplican esta metodología.

El Lean Startup (LS) suena como la solución perfecta para emprendedores y empresas que quieren innovar rápido y sin tantos riesgos. Pero, ¿realmente está funcionando como se promete o se está quedando en una buena idea que no encaja con la realidad? La falta de práctica en Lean Startup puede estar afectando más de lo que podemos ver.

La lectura del artículo de Lean Startup Certification de Tristan Kromer, fundador y CEO de Kromatic, nos llevó a reflexionar sobre la situación actual de las certificaciones en Lean Startup y cómo estas pueden estar contribuyendo a esa desconexión entre la teoría y la práctica. Comencemos desmenuzando el tema.

La brecha entre la teoría y lo que pasa de verdad: consecuencias de la falta de práctica en Lean Startup

El Lean Startup, según Eric Ries, nos dice que podemos transformar ideas en negocios exitosos usando ciclos rápidos de prueba y error. Suena genial en teoría, ¿no? Pero acá está el truco: muchos que dicen que dominan esta metodología solo lo han estudiado desde la teoría, no desde la experiencia real.

En el ámbito académico aprender sobre LS es válido a un nivel teórico. Los libros y charlas nos dan una buena base, pero no nos preparan para lo que pasa cuando realmente tenemos que ponerlo en práctica. La realidad es que no podés convertirte en un experto solo porque leíste un libro o hiciste un curso online. La verdadera experiencia viene de aplicar, fallar y ajustar sobre la marcha. Si no estuviste en el barro, no sabés realmente cómo funciona. La falta de práctica en Lean Startup afecta significativamente al desempeño de quien lo aplica.

Cursos express vs cursos reales de Lean Startup

Los cursos donde no existe la práctica vivencial y efectiva en la aplicación de LS, afectan significativamente a la posibilidad de incorporar sus conocimientos y resulta en un marco meramente teórico que difícilmente tenga relación con las necesidades del mundo real.  Es un marco teórico, pero que es necesario definir y ajustar a cada caso y situación, por lo tanto no promover la experimentación acompañada por un experto en el rol de tutor limita la capacidad de aplicación de los conceptos y herramientas que provee este enfoque.

La falta de práctica en Lean Startup es una de las causas del fracaso en la aplicación de este tipo de metodologías, ya que cuando se encuentran con la realidad y tienen que bajar los conceptos teóricos a sus proyectos, ya sea de emprendedores o dentro de una organización, carecen de la capacidad de poder hacerlo porque no encuentran conexión entre lo aprendido y estudiado y, las necesidades reales de un emprendimiento o un proyecto que se encuentran por fuera de un ejemplo teórico de un ppt.

En Vixerant creemos que la práctica es esencial tanto para quienes participan en las capacitaciones sobre LS como también para los mentores que guían este proceso. En nuestros workshops y capacitaciones de innovación, los equipos adquieren las habilidades para crear productos, servicios y modelos de negocio desde un enfoque transformador. Nuestros programas son espacios que proporcionan la experiencia práctica imprescindible, las “horas de vuelo” necesarias para enfrentar cada etapa del proceso con precisión, equipando a los participantes con las herramientas necesarias para manejar cualquier desafío que surja en el desarrollo de sus proyectos.

Lean Startup ha muerto

No, no ha muerto, pero sí se encuentra en una situación crítica. Aunque sigue siendo una metodología relevante, la falta de una organización central y la ausencia de profesionalización en sus principios y métodos han generado un estancamiento. A medida que otras disciplinas como Agile y Design Thinking han evolucionado y se han consolidado, Lean Startup corre el riesgo de quedar rezagado, perdiendo su capacidad de adaptarse y mantenerse vigente en un entorno empresarial que demanda constantemente innovación y flexibilidad. Estas son algunas de las reflexiones que Tristán Kromer.

Origen de Lean Startup y su diagnóstico actual

Lean Startup actualmente se encuentra en un momento de quiebre y toma de decisión: ¿certificación o no certificación? Otras metodologías cuentan con capacitaciones, una mayor organización y reconocimiento por parte de grandes empresas. Estas metodologías comparten los mismos principios, pero la diferencia radica en que LS hace mayor foco en la viabilidad general del negocio.

La filosofía Lean se distingue por centrarse en los procesos productivos, priorizando los cambios en las necesidades de los consumidores durante el desarrollo y perfeccionamiento del producto o servicio, así como en la eliminación de cualquier costo adicional. Esta metodología apunta a destacar todas las actividades que aportan valor a la cadena, eliminando aquellos procesos que puedan generar gastos innecesarios. Es un enfoque que se centra en la eficiencia y la optimización de los recursos, donde el feedback de los consumidores es el elemento más importante para el éxito del producto a lanzar.

Todo muy lindo, pero ¿qué sucede en la realidad? ¿Cómo se validan empíricamente estos conocimientos? 

Sin certificación oficial: pseudoexpertos por doquier

Hoy en día la falta de una certificación oficial se convierte en una problemática ya que posibilita a que cualquier persona que haya hecho un curso, visto algunos videos en internet o haya leído el libro de Eric Ries se considere a sí mismo un experto y que crea que posee la habilitación para brindar capacitaciones, consultorías y dictar talleres para empresas y emprendedores. Evidentemente, este tipo de enseñanzas no tienen un valor real, ya que no pueden transmitir experiencias, fracasos, errores o aprendizajes propios. El expertise no se construye solo con lo que se lee en un libro o repitiendo ejemplos de otros.

Siendo el objetivo principal de esta metodología minimizar el riesgo, reducir las pérdidas y gestionar de manera eficiente el tiempo requerido para el desarrollo, posicionamiento y sostenimiento de las startups en el mercado, la experiencia de quienes enseñan este enfoque es fundamental, ya que ahí se encuentra la prueba fehaciente del éxito y el potencial del LS.

Viendo la luz a través del túnel

El gran problema de esta metodología ágil no es tanto la teoría en sí, sino la desconexión entre el conocimiento académico y la experiencia práctica. Para que este enfoque realmente funcione y no se quede en una idea atractiva, es crucial que se incluya una buena dosis de práctica en la enseñanza y la aplicación. Solo así podremos asegurarnos de que las ideas innovadoras se conviertan en herramientas efectivas para emprendedores y empresas, en lugar de quedarse como un concepto interesante que no logra despegar.

En Vixerant, comprendemos que la verdadera efectividad del Lean Startup no radica únicamente en la teoría, sino en la experiencia directa y vivencial. Por eso, ofrecemos servicios que van más allá de la formación tradicional, brindando experiencias reales donde los emprendedores, equipos y mentores pueden aplicar, experimentar y aprender en tiempo real. A diferencia de otros enfoques que se limitan a lo teórico, nuestros programas están diseñados para cerrar la brecha entre el conocimiento académico y la práctica efectiva, asegurando que cada concepto se transforme en una herramienta útil en el contexto real de cada proyecto.

Algunas preguntas que surjen son:

¿Cuán importante es tener un mentor con experiencia real en Lean Startup durante el proceso de aprendizaje?

¿Es necesaria una certificación oficial para quienes imparten las capacitaciones de LS?

¿Cómo la falta de práctica vivencial afecta a la hora de aplicar los conocimientos teóricos de la metodología?

Queda mucho por hacer y mejorar, pero ponerlo en la mesa es una primer paso hacia el cambio.